Un Domingo de Ramos más el Señor de los Ángeles junto con su madre paseó por las calles de Ciudad Real repartiendo salud y emociones.
A pesar de las dudas por el tiempo, el sol rozó sus caras y permitió que la Hermandad cumpliera su plena estación de penitencia.
Detallazo de la hermandad acordándose del Pequeño Gabriel, el eterno pececillo.
¡Que la madre de Dios lo recoja en sus brazos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario